Para muchos, buena parte del día se le pasan trasladándose enun coche, algunos le toman tanto cariño que hasta les dan un nombre y, curiosamente, los hombres suelen ponerle nombres de mujer y viceversa en el caso de las féminas. Pero todo tiene un tiempo de vida útil, una falla lleva a otra, y queda acorralado en un ir y venir al taller hasta que,inevitablemente, se comienza a considerar la opción de venderlo.
Puede que sea muy duro salir de su “Lucas” (un probable nombre con el que sea bautizado el coche), pero venderlo no es tan malo, siempre y cuando tenga en cuenta algunos aspectos importantes para que la decisión le sea una solución más no un problema. El primer paso debe ser decidirse en el menor tiempo posible, puesto que a medida que este transcurre, el vehículo va perdiendo valor y pueden agravarse las averías o incluso surgir nuevas.
Decisión tomada
Si ya está decidido a vender, es necesaria una revisión para asegurarse de cuáles son realmente las averías y deliberar si es conveniente una reparación previa para poder recuperar un poco el coste y así elevar nuestro precio de venta. Algunas averías son tan grandes que es preferible venderlo por lo más que se pueda tal como está, con lo que al menos se quitaría ese quebradero de cabeza.
Muchos investigan sobre el valor actual de su coche para deducir el precio que pueden pedir por el suyo averiado, aunque si ha pasado por una reparación para acondicionarlo para la venta, también se ha de considerar este detalle para llegar al precio justo.
Otras opciones a considerar es si será vendido en un desguace o a un particular, el primero siempre tiene ciertas cláusulas que cumplir, en cuyo caso es prudente leerlas bien antes de llegar a un acuerdo para no tener malos entendidos, mientras que, si se vende por cuenta propia,hay queredactar un contrato de compraventa en el quede por escrito lo que ambas partes consideren apropiado para evitar futuros inconvenientes.
Vender no es fácil pero tampoco lo es seguir con un coche que no sea de utilidad y que con el tiempo trae más desperfectos, haciéndolo todo más difícil. En Internet se pueden consultar estos detalles e incluso se encuentran páginas dedicadas solo a la compra y venta de coches averiados, usados o siniestrados.
Lucas tendrá un mejor lugar en otras manos, y usted podrá darle la bienvenida a Pancho.